domingo, 20 de enero de 2008

Acuerdo para depurar las aguas residuales en la EDAR de Valladolid

El tercer borrador será el definitivo, porque ha sido valorado por Jesús Viejo como bueno y ajustado a las demandas por él hechas ante el ayuntamiento de Valladolid. La tasa de depuración se rebaja ostensiblemente respecto a la fijada en el primer borrador, de manera que los vecinos de Laguna no serán discriminados con relación a los de Valladolid y pagarán una tasa similar a la pagada por los vallisoletanos. Esta tasa se cifra en 60 euros anuales de promedio.Tras 20 años con el problema aparcado, mirando para otro lado como si no pasara nada, mientras contaminábamos el Duero...; tras una rutilante promesa de dupuradora nueva en el programa electoral y en el pacto de gobernabilidad que no han sido sino brindis al sol , improvisados al albur del momento electoral, irrespetuosos con los vecinos, se impone por fin la realidad, con un resultado que la Junta conocía perfectamente antes de las elecciones, pues la depuradora no se habría hecho nunca sin una buena subvención autonómica. La Junta tenía la decisión tomada hacía tiempo... y Jesús Viejo, enredado en su propia maraña, prometió lo que no podía dar. Las cosas van , pues, por el único cauce por el que podían ir. Las aguas viajarán por un colector de 5 kms para encontrarse con las de Puenteduero y llegar hasta la EDAR del camino viejo de Simancas, recorrido cuya declaración de impacto ambiental fue aprobada tiempo ha por la Junta, cuando los vecinos seguíamos embelesados con la nueva depuradora del señor Viejo.Los plazos administrativos, que se harán más largos de lo que desearíamos, nos pueden dejar la obra hecha en dos años; aunque Jesús Viejo ha dado abundantísimas muestras de su "destreza" para incumplir plazos. En esta ocasión, no esperamos menos de él, pues aplicar una tasa de 60 euros ( 20 euros en cada recibo) es el peor trago que se le puede hacer pasar a un alcalde; así pues, la obra se puede retrasar un año, con lo cual estaría acabada dentro de tres; y como los recibos se están cobrando con un año de retraso; se cobrarían las nuevas tasas al cuarto año. Este parece un cálculo muy razonable para quitarse el muerto de encima. Todo apunta a que la engorrosa tasa de depuración de aguas residuales será el "regalo" que Jesús Viejo hará en su despedida al próximo alcalde.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Venga ya, cómo va a ser tan generoso