La fiesta ha sido un éxito. La plaza se ha llenado. La gente ha salido satisfecha. ¿Qué más se puede pedir? ¡Quién le iba a decir a San Pedro la que se iba a liar por amansar aquel toro que huía de la vorágine de los amantes de la tauromaquia allá por el siglo XIV!
Y los "criticones" ya no pueden decir que se dedica más dinero a toros que a cultura. El monólogo ese de la "vagina" ha valido más que los novillos que ha pagado el ayuntamiento.
Y para los faltos de imaginación que sólo critican la falta de imaginación de ayuntamiento, que siempre hace lo mismo, pues sólo les queda estrujarse el coco a ver si se les ocurre otra cosa.
¡viva la fiesta!
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2 comentarios:
Respecto al éxito o no de la fiesta cada uno puede opinar tal y como la haya vivido. Habrá quien piense que lo ha sido y quien crea que hubiera sido mejor que San Pedro hubiera ido a un concierto de Rock antes de andar parando toros (¡con el peligro que conlleva!).
No obstante, ya lo decían Golpes Bajos (no los que propinan los toros) que los tiempos son malos para la lírica: "mueven más voluntades los toros que los versos de las vaginas".
A seguir con el éxito de la fiesta. Total, entre votos y toros sólo diverge una consonante (y otra mal colocada).
Al fin y al cabo, no es más que una fiesta... ¿pero qué es una fiesta?...
FIESTA:
Empacho de golosinas
ofrecidas al pueblo con dispendio
con la paternal intención
de adormecer el estómago
para que no sienta apetito
ni necesidad de pedir "auténtica comida".
"AUTÉNTICA COMIDA":
Comida de escaso gusto
aunque de noble enjundia
rechazada por estómagos
hechos al halago de la golosina,
y que presenta el enojoso embargo
de muscular en exceso
la materia gris de nuestro cerebro.
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